MARTA Y MI VIDA
¡Una amiga de verdad!
«Soy lisiado… ¡No sirvo para nada!»
«Estoy desilusionado, hastiado de la vida, sin fuerza ni ánimo…»
«Soy adicto, depresivo…»
«Estoy con una enfermedad incurable»
«¡He pensado quitarme la vida…!»
Martita ¡Ayúdame!
“Sean valientes!, decía Marta ¡acudan a Jesús!
“Mi alma está tan fuertemente encandilada por Jesús, envuelta de Jesús, bañada de Jesús que se olvida completamente de sí misma, para no ver más que a su bienamado” (9-01-1931)
“Cada mañana besemos con amor nuestro crucifijo, prometiendo a Jesús llevar pacientemente, generosamente, la cruz del día” (6-01-1931)
“La unión a Dios, la vida interior… el desprendimiento son posibles en todos los caminos… accesibles a todas las almas…” (9-01-1931)
“Buscar a Dios, es la fe… encontrarlo es la esperanza… conocerlo, es el amor… sentirlo es la paz… saborearlo es la alegría… poseerlo es la embriaguez” (15-01-1931).
“Se me niega la acción en la tierra, pero Jesús me da el ejercer la acción de la oración, del amor en el sufrimiento, en los sacrificios desconocidos. Eso parece estéril en el mundo, pero cuán fecunda delante de Él. Mi parte es muy bella, es la parte de Jesús y de María, es la parte de los ángeles en el cielo, que adoran y que oran. Dios mío, da a mi inactividad en desbordamientos, una actividad profunda que corresponda y sobrepase las más laboriosas tareas! (2-02-1931)
Testimonios
«Marta nos transmitía una fuerza que nos “revitalizaba”. Siempre había que marchar, volver a arrancar.»
A un miembro del Foyer:
“Se necesitan santos. ¡Nada de mediocridad, nada de más o menos en un camino llano! Se necesita día tras día, minuto tras minuto, trepar una nueva cumbre, ir de ascensión a ascensión”.
Marta se ingeniaba para hacer olvidar que estaba enferma y sufría constantemente. “Quiero que alrededor mío y en mí irradie la armonía, la alegría y la inmensa bondad de corazón” (29- 3-1930)
Frente a un futuro roto, a la violencia del dolor, la incomprensión, Marta afirmaba: “Dios es bueno, Dios es Padre, ¡Dios nos ama! Dios se compadece y alivia todos nuestros sufrimientos… Todos nuestros dolores, Jesús los comparte… Por todas nuestras cruces, quiere poner flores (Todas nuestras cruces, Él las hace florecer).«
Conoce más sobre Marta
- MARTA, TAN PEQUEÑA Y TAN GRANDE
«Martita, te confío… intención… desde ya, ¡Gracias!» Testimonios «Marta nos transmitía una fuerza que nos… Lee más: MARTA, TAN PEQUEÑA Y TAN GRANDE - MARTA VENERABLE
Síntesis de la “Positio” propuesta para la postulación a la beatificación de Marta Robin Las… Lee más: MARTA VENERABLE - MARTA Y MI VIDA
¡Una amiga de verdad! «Soy lisiado… ¡No sirvo para nada!» «Estoy desilusionado, hastiado de la… Lee más: MARTA Y MI VIDA
